Casa Crecente

La idea consiste en adaptarse a la topografía, y disponer los espacios de tal manera que se cree una relación directa entre el exterior y el interior (lejos de cerrarnos al ámbito que nos rodea) mostrando una clara intencionalidad contemplativa. La distribución en planta se obtiene procurando el máximo aprovechamiento de la superficie construida posible distribuyendo el programa en tres módulos diferenciados tanto por su tratamiento en su cerramiento exterior como por la altura que adquieren, en función del uso al que responden. Los tres módulos se solapan para articularse entre sí, dicha solución se adopta para responder al programa solicitado; El primer módulo responde a los usos nocturnos (de servicio y descanso), mientras que el segundo módulo responde a los usos diurnos (de relación y ocio), el tercero comprende usos auxiliares (marcan los accesos de la vivienda, peatonal y rodado). Los módulos se disponen sobre el solar por razones de soleamiento y para la creación de distintas zonas dentro de la superficie libre del solar. El primer módulo tiene un carácter más cerrado con pequeñas aberturas para su ventilación e iluminación directa, pero con una intencionalidad diferente marcada por su uso, refleja la intimidad y privacidad de dicho elemento, como una gran caja negra cuya distribución racional y ordenada solventa los espacios más íntimos de la vivienda, destacando su marcado contraste con respecto a los otros módulos de la edificación. El segundo módulo es el más abierto con una composición de huecos que pretende establecer una continuidad con el paisaje exterior, adquiriendo una mayor fluidez espacial disponiéndose como un mirador dentro de la propia parcela, acotando las estancias interiores. El tercer módulo constituye un gran pórtico que comprende los accesos a la vivienda, por un lado el peatonal y por el otro el rodado, un elemento de gran altura que marca de una manera sutil los acceso de la vivienda. La elección de los materiales viene dada por el carácter de cada módulo, y respondiendo también a su relación directa con el paisaje rural, y la tradición constructiva de la arquitectura vernácula gallega, granito, pizarra, vidrio, etc.