A lodging in the quarry, looking at Tungurahua | La Cabina de la Curiosidad

La cabina de la curiosidad, es un equipo de artesanos cuyo conocimiento y experiencia se enfoca en la reflexión y la crítica del paradigma en el que vivimos. Sus herramientas en el diseño permiten una mirada amplia desde los pequeños detalles hasta la incidencia en ideas transformadoras de la urbe. Sus principales afanes son; la concientización territorial, los procesos limpios medioambientales, la enseñanza, el lenguaje gráfico narrativo y etnográfico, la arquitectura, el paisaje, la construcción, la rehabilitación y la gestión, mediante metodologías y procesos de diseño especializados para la ejecución de proyectos.

Los ejes de discusión y abordaje son: Comunidad, Territorio, Inmersiones, Sistemas, Exploraciones, Actos poéticos, Reciclajes y Artilugios

La Cabina de la Curiosidad
Marie Combette / Daniel Moreno Flores

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Stones
The two lodgings were developed in a stone quarry in the town of Baños de Agua Santa. The land is sheltered by the Tungurahua Volcano, which was in eruption for 20 years, in addition, the Pastaza River passes to the opposite side.

The land is divided into two sections and therefore into two different uses:
1. Forty percent of the surface is devoted to a quarry; it runs from the top of the property to the riverbed. Dumpers, excavators, sieves, large volumes of stones cover the surrounding landscape.
2. The remaining area is in the process of remediation to returned it to its natural state. This section has different ecosystems with native vegetation, there are different climatic levels, therefore, the vegetation changes. The higher areas are dominated by Achupallas and low Andean vegetation; the lower shaded areas, close to the river, which is feed by streams coming from the mountain, is forested.

Changing the model
The owners have put their energy in a process of a succession of activities, changing the extractive quarry model to an idea of conservation of the ecosystems of the land; their intention is to change the property for adventure tourism activities, taking advantage of its large volcanic rock walls for climbing. They have camping areas and now lodges.

Lodgings with memory of a Quarry
All the obsolete objects discarded in the quarry have been put to use, as a dialogue of time and memory, accompanying this unique circumstance. The character of the lodgings share elements and materials of the quarry.

In this spatial remediation, the materials come from 3 places:

The natural context

a) The giant stones that have been placed as structural supports are remnants of the old quarry.
b) Stone slabs from the a 50 m high and 400 m wide cliff, were used for the sinks in the lodges.
c) Gravel and sand from the quarry have been placed in walkways and outdoor spaces.

Recycling
a) Old sieves and pipeline pipes, that were discarded in the quarry, were use in building the lodges.
b) Metal pieces, carved stones, rods and wood (staves and beams) are elements that they had stored from old constructions in the town of Baños.
c) There was also a coil of thick steel cable, a ladle, small ladle nails, among other elements typical of machinery spare parts.
These recycled elements used in the lodges embrace the new visitors, generating spaces with the spirit of the quarry and the lodges are in harmony with the native vegetation.

The volcano
a) The new pine and colorado wood allows the visitor a spatial quality and the comfort needed in the interiors of the lodges and the separated dining room/ kitchen structure.
b) The constructions were created with two large, prefabricated trusses on the ground, easy to build and to load.

The experience of being inside the lodge is that of an observatory facing directly to the Tungurahua volcano and intensifies it so that the impression is majestic and very rooted in the place. 

[ES]

Hospedaje en la Cantera, viendo al Tungurahua.
‘Pedra inn’

Piedras
Los dos hospedajes se desarrollaron en una Cantera de pétreos en el poblado de Baños de Agua Santa. El terreno esta cobijado por el Volcán Tungurahua, que estuvo en erupción durante 20 años, además a un costado circula el río Pastaza.

El terreno se divide en dos secciones y por ende en dos lógicas diferentes:
1. Donde ocurre la explotación de la Cantera, correspondiente al 40% de la superficie. Recorre de arriba hasta el lecho del río. Volquetas, excavadoras, zarandas, grandes volúmenes de piedras son el paisaje circundante.
2. El área restante, no ha sido intervenida o está en proceso de remediación. Esta sección tiene distintos ecosistemas con vegetación nativa, hay diferentes pisos climáticos, por ende, la vegetación cambia. Las zonas más altas priman las achupallas y la vegetación baja andina; las zonas bajas con sombra donde existen ojos de agua, la vegetación es frondosa y húmeda.

Cambiando de modelo
La familia propietaria tiene puesta su energía en un proceso de sucesión de actividades, de cambiar de modelo extractivo hacia una idea de conservación de los ecosistemas del terreno, su intención está en actividades turísticas de aventura, sacando provecho de sus grandes muros de roca volcánica para hacer escalada. Tienen zonas de camping y ahora hospedajes.

Hospedajes con memoria de una Cantera
Se ha puesto en valor todos los objetos obsoletos que ha olvidado la Cantera, como un dialogo de tiempo y memoria, acompañando esta circunstancia única. El carácter de los hospedajes le corresponde a la Cantera.

En esta remediación espacial, los materiales provienen de 3 lugares:

1. el contexto natural - Las piedras gigantes que se han colocado son remanentes y ausencias de lo que se ha retirado en la actividad pétrea a lo largo de los años, ahora son los soportes estructurales. En la orilla del muro de 50 m de alto y 400m de ancho se depositan piedras lajas, las hemos ocupado para los lavabos. Ripios y arenas se han colocado en caminerías y espacios exteriores.

2. reciclajes - Las zarandas y los tubos de oleoducto son elementos de estructuras que han dejado de servir. Piezas metálicas, piedras labradas, varillas y maderas (duelas y vigas) son elementos que tenían almacenados de antiguas construcciones del poblado de Baños. También había un rollo de cable grueso de acero, un cucharón, pequeñas uñas de cucharón, entre otros elementos propios de los repuestos de las maquinarias.
Estos elementos reciclados abrazan a los nuevos visitantes, generando espacios con espíritu y sabor a Cantera y se posan para estar en armonía con la vegetación nativa originaria.

El volcán
3. la madera de pino y colorado, nueva, permite al visitante una calidad espacial y el confort que se necesita en los interiores de los hospedajes y el comedor intermedio. Las construcciones se materializan con dos grandes cerchas prefabricadas en suelo, sencillo de elaborar y de cargar. La experiencia es la de un observatorio proyectado directamente al volcán Tungurahua y lo intensifica para que la vivencia sea majestosa y con mucho arraigo del lugar.

Credits
Architecture Firm: La Cabina de la Curiosidad

Lead Architects: Marie Combette and Daniel Moreno Flores

Photography Credits: La Cabina de la Curiosidad (Marie Combette / Daniel Moreno Flores), Bicubik

Photography y Francesco Russo

Photographer’s Website: https://www.bicubik.photo/ www.francescorussophoto.com

Ingeniería: Patricio Cevallos

Pasantes:  Lorianne Breillad Richard y Andrés Lozada

Construcción: Carpintería Las Manos Sucias (Philippe Frechou, Ted la Cruz, Pedro Marrero, Yoswar Marrero, Yonatan Rodríguez), Equipo metal (David Tayo, Byron Lidioma, Jorge Sasi, Fredy Achote), Jaime Vivanco, Juan Pillapa e hidro Sanitario: Geovany Toaquiza

Ilustraciones: Marie Combette, Pinxcel (Sergio Calderón) y Fanny Perrot